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Las 7 Leyes Espirituales del Exito

(5) La Ley de la Intención y el Deseo

La intensión y el deseo tienen un infinito poder organizador en el campo de la potencialidad pura, porque todo deseo se encuentra el mecanismo para su realización

Esta ley se basa sobre el conocimiento científico de que en el campo quántico, toda la creación está constituida por energía e la información.

El término científico "campo quántico" es en realidad sólo la forma en que la ciencia llama al campo de la conciencia pura o de la potencialidad pura.

Desde la física quántica, nuestro cuerpo es uno con el universo pues al mismo tiempo está y contiene al universo.

Pero sin necesidad de interiorizarnos de principios científicos elaborados y complicados, basta con analizar nuestra experiencia cotidiana de que cualquier cosa a la cual prestemos atención, crecerá con más fuerza, y que cualquier cosa a la cual dejemos de prestar atención, se marchitará, se desintegrará y desaparecerá.

Piensa por ejemplo en una pareja. Cuanto más le prestes atención, más crecerá dentro tuyo pasando a ser parte de ti mismo, pero si le dejas de prestar atención tu amor por esa persona se marchitará y finalmente esa persona dejará de ser parte de ti (aunque tal vez sigas casado con ella)

La intención es quien organiza su propia realización, pues el acto de fijar la atención sobre algo, termina desencadenando una infinidad de sucesos espaciotemporales orientados a la consecución del resultado buscado (siempre y cuando respetes y cumplas también con las otras leyes espirituales del éxito)

Mientras no infrinjamos las leyes de la naturaleza, podemos literalmente dirigir las leyes de la naturaleza para convertir en realidad nuestros sueños y nuestros deseos porque la intención es el verdadero poder detrás del deseo.

Y la intención es tan poderosa pues en realidad se trata de un deseo sin apego al resultado. Tener solo un deseo se vuelve débil cuando todo lo que se tiene es atención acompañada con apego, mientras que la intención se vuelve fuerte cuando se combina con la sexta ley del éxito que es la ley del desapego.

Cuando aprendes a centrar tu conciencia en el momento presente, entonces la mayoría de los obstáculos de tu vida dejan de existir, puesto que solo se tratan de pensamientos que se desintegran al no tener tu atención.

La intención transformadora es la intención focalizada, es decir la intención que no se aparte de su propósito, es decir que tenemos que mantener la atención en el resultado final que esperamos alcanzar, con un propósito tan firme de alcanzarlo, que ningún acontecimiento contrario que se de en el presente pueda desviar nuestra energía mental. De esta forma se pueden eliminar de nuestra conciencia en forma total y completa todos los obstáculos, y al desaparecer de allí, no podrán concretarse en el mundo de todos los días.

Para que la intención generar la realidad a partir de su propio poder, nuevamente debemos entrar a los niveles profundos de la mente, los niveles Alpha y Theta, y desde ese nivel esencial es desde donde debemos liberar nuestros deseos.

Si tienes una serie de metas, es conveniente que confecciones una lista, para que puedas concentrar tu atención sobre ellas cuando entres en tu espacio silencioso interior. Por ejemplo si deseas alcanzar un éxito económico, debes entrar a los niveles mentales profundos con esa intención y luego salir de ese nivel liberando esa energía con el pensamiento de que lo que deseas ya ha sido creado, ya está en camino y nada puede evitar que suceda (salvo tu miedo y tus dudas)

Mira tu lista cada vez que vayas a entrar a tus niveles mentales profundos, y mírala también al despertarte a la mañana y al irte a dormir en la noche.

El plantar un deseo en el campo de la potencialidad pura, es como plantar una semilla en la tierra, si tú escarbas periódicamente la tierra para comprobar cuanto ha crecido tu planta, nada podrás cosechar. Debes plantar tu intención y dejarla florecer, ya que florecerá con seguridad.

Debes tener especial cuidado de no aceptar la visión que el mundo tenga de ti mismo. Una cosa es lo que los demás puedan ver en el presente, y otra cosa muy diferente es aquello en lo cual te estás transformando sin que nadie se de cuenta de ello. Una buena forma de lograrlo es no comentando tus deseos y tus ejercicios con los demás, salvo que tengas una fuerte conexión con otra persona con la cual compartas tu deseo.

El siguiente paso es renunciar a tu apego al resultado. Debes aprender a dejar que el universo sea quien elige qué es lo que más te conviene, lo cual quiere decir que tienes que aprender a estar en paz en la incertidumbre, y disfrutar de cada jornada de tu vida aunque desconozcas el plan del universo.

Tienes que dejar que sea el universo quien se encargue de los detalles. Una vez que has ingresado a los niveles mentales profundos y allí has liberado tus deseos e intenciones, ellos tienen un infinito poder organizador que utilizarán con seguridad, salvo que tú se los impidas.

Aprende a confiar en el infinito poder organizador de la ley de atracción quien se encargará por ti de todos los detalles que desconoces.

Dr. Roberto A. Bonomi

El Dr. Bonomi es el autor original de El Secreto y La Ley de Atraccion y ha escrito 4 libros, 2 DVD y 43 CD de autoayuda. Para informarse sobre los seminarios de Energía Mental (o Control Mental) del Dr. Bonomi consulte la siguiente página web www.drbonomi.com/seminarios.html
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